Importancia de reparar un cristal de coche roto
Como bien sabrás, el parabrisas es una pieza imprescindible en la estructura de cualquier vehículo a la hora de hablar de seguridad al volante, y es por ello que se le debe dar importancia a su correcto estado y mantenimiento.
Para conseguir mantener el parabrisas en perfectas condiciones, es fundamental visitar lo antes posible tu taller más cercano ante cualquier posible ralladura, grieta o impacto luna coche que aparezca y conseguir reparar luna coche precio de forma rápida y asequible, antes de que la rotura se expanda y por consiguiente, la sustitución completa del parabrisas sea la única opción posible.
Identifica los diferentes tipos de roturas de parabrisas
DESGASTE SUPERFICIAL: Simplemente se aprecia un roce o una raya en la superficie del cristal. Debido a que se produce por diferentes factores, es aconsejable vigilarlo para comprobar que su estado no empeora.
OJO DE BUEY: Consiste en agujero de un tamaño mínimo de entre uno y dos centímetros en la parte exterior del parabrisas. Se recomienda repararlo lo antes posible debido a que es una molestia evidente en lo a visibilidad se refiere.
COMBINADO: Similar al ojo de buey, pero con la particularidad de contar con pequeñas grietas que aparecen desde el centro o desde los bordes del impacto luna coche, causado normalmente por el choque de pequeños objetos externos.
ESTRELLA: Conocido también como rotura con grietas, cuando se encuentra el cristal coche roto por este tipo de impacto, la extensión por el resto del parabrisas es casi inminente debido a sus grietas de un tamaño mayor a la rotura combinada.
Evita tener que sustituir el parabrisas
Aunque en ciertas ocasiones la sustitución del parabrisas sea algo inevitable, existen diferentes prácticas que nos ayudarán a conservar la luna del vehículo en perfecto estado. Por ejemplo, algo tan simple y cotidiano como mantener la distancia de seguridad, evitará posibles impactos causados por piedrecitas y gravilla impulsadas por las ruedas del vehículo.
Otro truco que te servirá es tener cuidado con los cambios bruscos de temperatura tanto en verano como en invierno. Al intentar quitar el hielo del parabrisas con agua caliente, o luchar contra el calor encendiendo el aire acondicionado al máximo nada más subirnos al coche, nos arriesgamos a que se creen molestas grietas en el cristal.
Texto tomado de: https://www.ralarsa.com
